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Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
4 participantes
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Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
¡Joder! ¿Os podéis creer lo que he encontrado? ¡Un río! Alaaaa. Y además arbolitos y todo... ¡Qué diver! En fin. Es buen lugar para limpiarse y eso. Me alegro de haberlo encontrado. Yaaa, ya sé que hace frío, pero me da igual. ¡Necesito una ducha urgente! Sí, es que tengo un aspecto penoso de verdad. Pero bueno, como está anocheciendo, me conformaré con meter los piececillos.
Y eso fue lo que hice. No, no me tenía que arremangar el pantalón por son cortos, gran ventaja. Y tampoco tenía que dejar las cosas al lado. Más que nada, por que no tenía ninguna cosa. Voy con lo puesto. Ya, lo mío es felicicdad, lo sé. Pero mira, hasta que no encuentre una buena arma paso de llevar palitos y cuchillitos. Lo mío es a lo grande o.... nanai. Asi que aquí estoy, completamente congelada, con los pies en un agua oscuro.
Sé que soy demasiado vulnerable, pero no puedo hacer nada. Algo de defensa personal sé, pero, ¿me bastará eso con los zombies? Lo dudo bastante. Lo que pasa es que... Como soy como un rata de alcantarilla les cuesta pillarme. Lo sé. Baah, pero llegará un momento en que lo hagan y moriré. Supongo que eso ya llegará, mientras, me voy a dedicar a pensar cosas más alegres, porque la soledad está causando estragos en mi mentecilla y en mi corazón. Eso debe de ser muy malo. Inocente de mí. Pero bueno, no tengo nada mejor que hacer que esperar, y esperar, y seguir esperando. ¡Qué aburrimiento de vida! Casi prefiero ser atacaada por un zombie.
Y eso fue lo que hice. No, no me tenía que arremangar el pantalón por son cortos, gran ventaja. Y tampoco tenía que dejar las cosas al lado. Más que nada, por que no tenía ninguna cosa. Voy con lo puesto. Ya, lo mío es felicicdad, lo sé. Pero mira, hasta que no encuentre una buena arma paso de llevar palitos y cuchillitos. Lo mío es a lo grande o.... nanai. Asi que aquí estoy, completamente congelada, con los pies en un agua oscuro.
Sé que soy demasiado vulnerable, pero no puedo hacer nada. Algo de defensa personal sé, pero, ¿me bastará eso con los zombies? Lo dudo bastante. Lo que pasa es que... Como soy como un rata de alcantarilla les cuesta pillarme. Lo sé. Baah, pero llegará un momento en que lo hagan y moriré. Supongo que eso ya llegará, mientras, me voy a dedicar a pensar cosas más alegres, porque la soledad está causando estragos en mi mentecilla y en mi corazón. Eso debe de ser muy malo. Inocente de mí. Pero bueno, no tengo nada mejor que hacer que esperar, y esperar, y seguir esperando. ¡Qué aburrimiento de vida! Casi prefiero ser atacaada por un zombie.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Mis reservas de agua se habían agotado, si, ya sé que llamar reservas a una botella de plástico de litro y medio es un poco exagerado pero quien no se consuela es porque no quiere. Así que allí iba yo, dispuesto a comprobar en mis carnes la potabilidad del agua fluvial, corría el riesgo de pasarme la proxima semana vomitando pero esa era una perspectiva mejor que la de morir de sed. Estaba oscureciendo y con la llegada de la noche, una ligera brisa fría se había levantado y para más inri aún tenía que buscar uno de esos refugios que consistía en cuatro paredes y un techo medio estable... quien me ha visto y quien me ve.
Con paso ligero, llegué a la ribera del río y para mi sorpresa no estaba solo. Desde donde yo estaba se trataba de una chica rubita y tenía toda la pinta de que se iba a dar un baño en el río... no espera, se conformaba con meter los pies en el agua al parecer, que pena pues hubiera sido un espectaculo digno de ver. En fin, otro día sería. Avancé mientras rebuscaba en la maleta la botella de agua vacía. Ella estaba de espaldas a mi aunque posiblemente me escuchara llegar.
- Te vas a resfriar.- dije a modo de saludo.
No hacía falta decir hola ni poner una sonrisa estúpida, los dos estábamos jodidos por tener que permanecer en ese mundo y ambos los sabiámos. Tal vez era por eso por lo que cada vez estaba más malhumorado y antisociable.
Con paso ligero, llegué a la ribera del río y para mi sorpresa no estaba solo. Desde donde yo estaba se trataba de una chica rubita y tenía toda la pinta de que se iba a dar un baño en el río... no espera, se conformaba con meter los pies en el agua al parecer, que pena pues hubiera sido un espectaculo digno de ver. En fin, otro día sería. Avancé mientras rebuscaba en la maleta la botella de agua vacía. Ella estaba de espaldas a mi aunque posiblemente me escuchara llegar.
- Te vas a resfriar.- dije a modo de saludo.
No hacía falta decir hola ni poner una sonrisa estúpida, los dos estábamos jodidos por tener que permanecer en ese mundo y ambos los sabiámos. Tal vez era por eso por lo que cada vez estaba más malhumorado y antisociable.
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Algo pisó las ramitas, justo detrás mía. Puse los músculos en tensión. ¿Otro puto zombie? Baaaah, a este me lo cargo, os lo juro. Pero un "te vas a resfriar" me sacó de mis dudas. Era un tío, por la voz grave. A saber, Dios mío. A lo mejor decide ahogarme en el río. ¡Qué locura! Venga, va, tengo que darme la vuelta.... ¡Es que estaba tan comdita! Joder, Gab, estás pirada.
Así que supongo que por eso giré la cabecilla hasta clavar en aquél tío mis ojos azules, completamente inocentes (?). Vale, no, de inocentes nada, pero tengo que probar a ver si cuela y me da aaaaargo. ¡Qué tengo hambre! ¿Tú te creees? Alguien como yo, con hambre... Todo un pecado. Arrrgh, estoy volviendo a ser irónica conmigo misma, mi cara debe ser todo un show.
-No sé porqué, pero lo de refriarme es para mí un mal menor ahora mismo.- sarcástica, cortante, con la lengua afilada... Gab pura y dura, sin barreras. ¿Para qué? Suele tener un humor de perros, y el más mínimo comentario lo saca a relucir. Mejor ser sincera sobre mi personalidad desde el principio, que así luego no se llevan disgustos ni se desmayan, como las viejitas esas de mierda que... No, no, me estoy llendo otra vez. ¡Tengo que centrarme! Ya sabía yo cuando los profesores dijeron "su hija sufre altos grados de distracción", que mi vida iba a ser dura. ¡pero no hasta este extremo! ¡Es que hay que joderse, señores y/o señoras! Laralaaaaaa, me estoy llendo otra vez, mejhor voy a levantarme, para tener algo mejor que hacer con la cabeza. Sí, necesito concentrarme para que mi cerebrillo mande la orden de andar, es que estoy tan cansada... Pobre de mí.
¡Mierda! ¡Creo que no tengo sincronización óculo-piezal. ¿Por qué coño acabo de pisar una piedra? ¿Por qué mierdas se me ha doblado el pie? ¿Por qué ostias he perdido el equilibrio? ¿Por qué cojones me estoy cayendo?... Jumppf.... Arrrgggh. ¡Mierda! Ahora seguro que cojo un constipado. He caído de lleno en el agua, inocente de mí. ¡Además, me duele el pie! El agua está conjelada, y no puedo para de boquear... Me voy a congelar. ¡Claaaro, no podía traerme más ropa al inframundo este de los cojones! ¿Noooo? Nada, que hoy muero congelada, os lo aseguro.
Le dediqué una mirada teñida de.... ¿Y yo qué coño sé de qué? Al tío ese que acababa de llegar. ¡Seguro que ha sido por su culpa. ¡Seguro que es un gafe de mierda!
-Me cago en la gran puta- fue lo único que logré musitar. Ya, que el agua no me llegaba a más del pecho, y que el agua no me arrastraba, pero esto jodidamente empapada, con el pelo mojado, y, además, tengo que apoyar el pie que me duele. ¡Estoy echa toda una super-woman, sin duda!
Me arrastré como pude hasta el bordillo. Pero.... Ya que estoy dentro... ¿Para qué coño salir? Saqué los brazos fuera del agua, a saber por qué, a apoyarlos sobre el duro suelo, peor bien comodita que me quedé yo ahí dentro, de verdad.
-¡Aaaaah, ostias, qué sigues aquí!- murmuré, más para mí misma que para él. Sí. En fin, voy a decir algo. Ya que hoy estoy medianamente sociable, voy a aprovechar, que seguro que mañana tendré un cambio de humor muy extraño y me dará por degollar todo lo que se me cruce por delante.- Me duele el pie.- afirmé, esta vez más alto. ¿Qué porqué lo he dicho? Ummmms. No lo sé, de verdad, pero mira, si el tío tiene una solución, bienvenido sea, y sino, que s evaya a tomar por culo.
Así que supongo que por eso giré la cabecilla hasta clavar en aquél tío mis ojos azules, completamente inocentes (?). Vale, no, de inocentes nada, pero tengo que probar a ver si cuela y me da aaaaargo. ¡Qué tengo hambre! ¿Tú te creees? Alguien como yo, con hambre... Todo un pecado. Arrrgh, estoy volviendo a ser irónica conmigo misma, mi cara debe ser todo un show.
-No sé porqué, pero lo de refriarme es para mí un mal menor ahora mismo.- sarcástica, cortante, con la lengua afilada... Gab pura y dura, sin barreras. ¿Para qué? Suele tener un humor de perros, y el más mínimo comentario lo saca a relucir. Mejor ser sincera sobre mi personalidad desde el principio, que así luego no se llevan disgustos ni se desmayan, como las viejitas esas de mierda que... No, no, me estoy llendo otra vez. ¡Tengo que centrarme! Ya sabía yo cuando los profesores dijeron "su hija sufre altos grados de distracción", que mi vida iba a ser dura. ¡pero no hasta este extremo! ¡Es que hay que joderse, señores y/o señoras! Laralaaaaaa, me estoy llendo otra vez, mejhor voy a levantarme, para tener algo mejor que hacer con la cabeza. Sí, necesito concentrarme para que mi cerebrillo mande la orden de andar, es que estoy tan cansada... Pobre de mí.
¡Mierda! ¡Creo que no tengo sincronización óculo-piezal. ¿Por qué coño acabo de pisar una piedra? ¿Por qué mierdas se me ha doblado el pie? ¿Por qué ostias he perdido el equilibrio? ¿Por qué cojones me estoy cayendo?... Jumppf.... Arrrgggh. ¡Mierda! Ahora seguro que cojo un constipado. He caído de lleno en el agua, inocente de mí. ¡Además, me duele el pie! El agua está conjelada, y no puedo para de boquear... Me voy a congelar. ¡Claaaro, no podía traerme más ropa al inframundo este de los cojones! ¿Noooo? Nada, que hoy muero congelada, os lo aseguro.
Le dediqué una mirada teñida de.... ¿Y yo qué coño sé de qué? Al tío ese que acababa de llegar. ¡Seguro que ha sido por su culpa. ¡Seguro que es un gafe de mierda!
-Me cago en la gran puta- fue lo único que logré musitar. Ya, que el agua no me llegaba a más del pecho, y que el agua no me arrastraba, pero esto jodidamente empapada, con el pelo mojado, y, además, tengo que apoyar el pie que me duele. ¡Estoy echa toda una super-woman, sin duda!
Me arrastré como pude hasta el bordillo. Pero.... Ya que estoy dentro... ¿Para qué coño salir? Saqué los brazos fuera del agua, a saber por qué, a apoyarlos sobre el duro suelo, peor bien comodita que me quedé yo ahí dentro, de verdad.
-¡Aaaaah, ostias, qué sigues aquí!- murmuré, más para mí misma que para él. Sí. En fin, voy a decir algo. Ya que hoy estoy medianamente sociable, voy a aprovechar, que seguro que mañana tendré un cambio de humor muy extraño y me dará por degollar todo lo que se me cruce por delante.- Me duele el pie.- afirmé, esta vez más alto. ¿Qué porqué lo he dicho? Ummmms. No lo sé, de verdad, pero mira, si el tío tiene una solución, bienvenido sea, y sino, que s evaya a tomar por culo.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
La muchacha se giró y me miro... ufff, que cara de mala ostia tenía, a su lado Hannibal Lecter parecería una monja de la caridad. Me planteé un objetivo que debería cumplir: llenar la botella y desaparecer de allí cuanto antes, pues algo me decía y más después de escuchar su réplica, que 5 minutos en presencia de aquella muchacha y acabariámos tirándonos zombis a la cabeza. Así que avancé en dirección a la orilla del río con mirada indiferente, comiéndome con patatas fritas una contrarréplica sagaz y mordiente capaz de generar un conflicto de dimensiones bíblicas entre esa muchacha y yo.
Y en el momento en que procedía a desabrocharme el nudo de las zapatillas, los astros se alinearon y algo extraño sucedió. En lo que solo podía ser calificado de show, aquella chica se digno a deleitarme con una acrobática caida, y quien dice acrobática, dice cómica y torpe. Fue una de esas caidas... ¿cómo explicarlo? De esas en las que el implicado parece que nunca va a terminar de caerse hasta que finalmente se mete la torta padre. Con un sonoro plof, el show terminó, dejándome manchado por todo mi cuerpo de gotas de agua y fango provenientes de la salpicadura.
Ahora ¿Que se supone que debía de hacer?¿Aplaudir?¿Reir? "Concentraté en la misión, llenar botella, llenar botella." me repetí mentalmente. La miré intentando permanecer serio, algo dificil de llevar a cabo, pues la estampa de la chica llena de barro y entera mojada era cómica... ¿qué cómica? Era para partirse el culo allí mismo, seamos realistas. Me acerqué a ella y me puse en cuclillas a medio metro de distancia.
- Me duele el pie.- Bien, y a mi que cojones me importaba que le doliera el pie, solo venía a llenar la puñetera botella y ya que ella estaba mojada, tal vez me la pudiera llenar de agua más limpia a la de la orilla, rio adentro.
- Lo raro es que no te duela nada más.- dije politicamente.- Oye, ya que te has decidio dar un baño, ¿me podrías llenar esta botella de agua que no este tan sucia como la de la orilla? Harías tu buena acción del dia- Puse voz de niño bueno, o al menos lo intenté... no le pidas peras al olmo.
Y en el momento en que procedía a desabrocharme el nudo de las zapatillas, los astros se alinearon y algo extraño sucedió. En lo que solo podía ser calificado de show, aquella chica se digno a deleitarme con una acrobática caida, y quien dice acrobática, dice cómica y torpe. Fue una de esas caidas... ¿cómo explicarlo? De esas en las que el implicado parece que nunca va a terminar de caerse hasta que finalmente se mete la torta padre. Con un sonoro plof, el show terminó, dejándome manchado por todo mi cuerpo de gotas de agua y fango provenientes de la salpicadura.
Ahora ¿Que se supone que debía de hacer?¿Aplaudir?¿Reir? "Concentraté en la misión, llenar botella, llenar botella." me repetí mentalmente. La miré intentando permanecer serio, algo dificil de llevar a cabo, pues la estampa de la chica llena de barro y entera mojada era cómica... ¿qué cómica? Era para partirse el culo allí mismo, seamos realistas. Me acerqué a ella y me puse en cuclillas a medio metro de distancia.
- Me duele el pie.- Bien, y a mi que cojones me importaba que le doliera el pie, solo venía a llenar la puñetera botella y ya que ella estaba mojada, tal vez me la pudiera llenar de agua más limpia a la de la orilla, rio adentro.
- Lo raro es que no te duela nada más.- dije politicamente.- Oye, ya que te has decidio dar un baño, ¿me podrías llenar esta botella de agua que no este tan sucia como la de la orilla? Harías tu buena acción del dia- Puse voz de niño bueno, o al menos lo intenté... no le pidas peras al olmo.
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
¡Dios! Se está descojonando de mí interiormente, ¿verdad? ¡Pues a mí no me hace ni puta gracia! Me cago en... ¡Arrrgh! Frío, sí, frío. Me estoy congelando, coño. Baaaah, me da igual. Seguramente, después de esto moriré de hipotermia, así que voy a disfrutar mis últimos momentos como Gab, que seguramente serán igual de traumáticos y horribles que los de siempre. Fruncí el ceño, clavando mis ojillos color mar en los suyos. Tenía pinta de... no sé, de estar jodidamente concentrado en algo. Como si se hubiese centrado en su mundo, y ya no quisiese salir de él. ¡Vaya, vaya, con el cabroncete! Já, pero de Gab no se libra, no de esta rubia problemática.
Concentrado en sus extraños pensamientos, se acuclilló ante mí. ¿Qué imagen debo de estar dando? Baaah, tampoco me importa tanto, verdaderamente. Así que sostuve su mirada con una cara de póquer muy entrenada, en la que no dejaba traslucir un mísero sentimiendo, ni siquiera ese humor cómico que me estaba provocando aquella situación. ¡Por Dios! ¿Qué no me duele nada más? Diooos, para seros sincera, me duele todo. Cada puta célula, ¡joder! Mi cabeza, mi pie, mis músculos agarrotados, mis gemelos, mis bíceps, mi... todo, joder, todo.
Encima el tío es sarcástico... ¡Aquí solo yo puedo ser sarcástica! ¡Jum! Y quiere que le rellene una botella de agua... No, decididamente, esta conversación tan extraña no va a acabar bien. Es más, me está ordenando que le llene una botella de agua cuando los dos sabemos que se está descojonando de mí.
Antes, a nadie se le pasaba hacerle eso a Gab. Era intocable, peligrosa como yo sola. Y aquí, por mucha supervivencia de la que tenga que ser consciente, voy a ser igual. Además, a mi cerebrillo se le estaba ocurriendo una idea... De puta madre, sin duda.
-¿Me ves cara de ir haciendo buenas obras?- rodé los ojos, con tanta inocencia como fui capaz. Ya, cando hago eso, es que nada bueno puede pasar. Levanté los brazos, divertida como yo, sola, con esa sonrisa que solo deja translucir una cosa: peligro. Y, por consecuente, adrenalina. Me fijé en la chaqueta, genial para tirar de los bordes. Y allí fueron a para mis manos, tan rápidas como un par de culebrillas.- Yo creo que no.- y, justo después de decir aquello, tensé los brazos y atraje hacia mí a aquél tío, que por cierto, estaba de bien... En fin, que sí. Que, en su posición, y con lo facil que era perder el equilibrio de rodillas, tenía ya un pie en el río.
Concentrado en sus extraños pensamientos, se acuclilló ante mí. ¿Qué imagen debo de estar dando? Baaah, tampoco me importa tanto, verdaderamente. Así que sostuve su mirada con una cara de póquer muy entrenada, en la que no dejaba traslucir un mísero sentimiendo, ni siquiera ese humor cómico que me estaba provocando aquella situación. ¡Por Dios! ¿Qué no me duele nada más? Diooos, para seros sincera, me duele todo. Cada puta célula, ¡joder! Mi cabeza, mi pie, mis músculos agarrotados, mis gemelos, mis bíceps, mi... todo, joder, todo.
Encima el tío es sarcástico... ¡Aquí solo yo puedo ser sarcástica! ¡Jum! Y quiere que le rellene una botella de agua... No, decididamente, esta conversación tan extraña no va a acabar bien. Es más, me está ordenando que le llene una botella de agua cuando los dos sabemos que se está descojonando de mí.
Antes, a nadie se le pasaba hacerle eso a Gab. Era intocable, peligrosa como yo sola. Y aquí, por mucha supervivencia de la que tenga que ser consciente, voy a ser igual. Además, a mi cerebrillo se le estaba ocurriendo una idea... De puta madre, sin duda.
-¿Me ves cara de ir haciendo buenas obras?- rodé los ojos, con tanta inocencia como fui capaz. Ya, cando hago eso, es que nada bueno puede pasar. Levanté los brazos, divertida como yo, sola, con esa sonrisa que solo deja translucir una cosa: peligro. Y, por consecuente, adrenalina. Me fijé en la chaqueta, genial para tirar de los bordes. Y allí fueron a para mis manos, tan rápidas como un par de culebrillas.- Yo creo que no.- y, justo después de decir aquello, tensé los brazos y atraje hacia mí a aquél tío, que por cierto, estaba de bien... En fin, que sí. Que, en su posición, y con lo facil que era perder el equilibrio de rodillas, tenía ya un pie en el río.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Escuché su ultima frase y tardé unos segundos en intuir lo que significaba aquellas paradas en conjunción con esa mirada y la peculiar sonrisa. Mierda, lo que faltaba, pues con esa pose se me hacía jodidamente sexy la chica, lástima que ese momento duró un segundo. No fuí los suficientemente rápido como para apartarme de esas garras de bruja y me precipité al vacío, un vacio de 20 cm pero a mí se me hizo un vacío de esos que acojonan. Fuí a caer hacia delante, justo encima de ella pero era inevitable, me iba a calar hasta los huesos.
- Hija de... glup...glup.- Dije mientras caía antes de que mi cabeza se sumergiera en el agua mezclada con lodo y tragara un mar de esa mierda líquida.
Lo había calculado a la perfección la muy zorra, la parte izquierda de mi cuerpo cayó encima suyo pero el resto se sumergío en los 15 cm de agua que había, entre ello mi cabeza. Apoyandome en las manos, pude sacar la cabeza del agua al tiempo que tosía. El frío era lo de menos, lo peor era el sabor a mierda que me estaba quedando en la boca. Cuando paré de toser escupí unas cuantas veces intentando que mi boca no se transformara en una cloaca, y obviamente unos cuantos escupitajos fueron a parar al cuerpo del demonio rubio que tenía a mi lado.
Me levanté y con toda la dignidad de la que fui capaz, es decir ninguna, cogí la botella que flotaba en la orilla y me adentre un poco para llenarla de agua medianamente limpia. Salí del rio pasando por el lado de la rubia sin mirarla siquiera, aunque no me faltaron ganas de hacerle una ahogadilla. ¡No! Estaba por encima de esa tía, pero por otro lado... que coño, la cabrona se lo había ganado a pulso. Dejé la botella al lado de la mochila en la orilla y volví donde la desgraciada esa rubia. "No, no me mires con esos ojitos de cordero degollado, no te va a servir de nada"
¿Soy un capullo por hacer lo que hice a continuación? Probablemente si y además a mucha honra. Simplemente le hice una ahogadilla de medio segundo, tampoco fue para tanto. Al tiempo que sumergía su cabeza desahogué algo del cabreo que me había pillado.
- Ahora estamos en paz.- dije y me fui hacia la mochila con tal mala ostia que practicamente iba levitando.
- Hija de... glup...glup.- Dije mientras caía antes de que mi cabeza se sumergiera en el agua mezclada con lodo y tragara un mar de esa mierda líquida.
Lo había calculado a la perfección la muy zorra, la parte izquierda de mi cuerpo cayó encima suyo pero el resto se sumergío en los 15 cm de agua que había, entre ello mi cabeza. Apoyandome en las manos, pude sacar la cabeza del agua al tiempo que tosía. El frío era lo de menos, lo peor era el sabor a mierda que me estaba quedando en la boca. Cuando paré de toser escupí unas cuantas veces intentando que mi boca no se transformara en una cloaca, y obviamente unos cuantos escupitajos fueron a parar al cuerpo del demonio rubio que tenía a mi lado.
Me levanté y con toda la dignidad de la que fui capaz, es decir ninguna, cogí la botella que flotaba en la orilla y me adentre un poco para llenarla de agua medianamente limpia. Salí del rio pasando por el lado de la rubia sin mirarla siquiera, aunque no me faltaron ganas de hacerle una ahogadilla. ¡No! Estaba por encima de esa tía, pero por otro lado... que coño, la cabrona se lo había ganado a pulso. Dejé la botella al lado de la mochila en la orilla y volví donde la desgraciada esa rubia. "No, no me mires con esos ojitos de cordero degollado, no te va a servir de nada"
¿Soy un capullo por hacer lo que hice a continuación? Probablemente si y además a mucha honra. Simplemente le hice una ahogadilla de medio segundo, tampoco fue para tanto. Al tiempo que sumergía su cabeza desahogué algo del cabreo que me había pillado.
- Ahora estamos en paz.- dije y me fui hacia la mochila con tal mala ostia que practicamente iba levitando.
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Alcé una ceja. Sí, una sola, esperando el momento de su caída, que no tardó demasiado. Aquello iba a ser la ostia, sin duda. La parte izquierda de su cuerpo chocó contra el mío. ¡Mierda, más dolor! Pero lo soporté como una valiente (?), sin queja alguna, como hace la gente responsable de sus actos. Así que solo me quedaba la parte buena, escuchar el sonoro "plof" de su caída, y el de su cara con ese agua pantanosa y asquerosa. Sí, yo había caído de espaldas, y no había tragado demasiada agua, por no decir que no he tragado nada. Pero el vacilón este ha caído de boca, saboreando, al parecer, toda una delicia.
¡Já! Por Dios, me voy a descojonar, ahora intenta hacerse el orgulloso y digno. Por Dios, sin antes dirigirme ni una mirada... ¿Dónde coño está la gracia? Ah, sí, en el ostión que se ha metido. Recordadme que se lo recuerde durante toda su existencia.
Lo observé. Llevaba una cara de malas pulgas... Con su botellita de los cojones. Yo creo que va a morir envenenado si traga más agua de esta, de verdad. No se lo recomiendo a nad... Bueno, seeeeh, a él sí, que se ha reido de mí. Y NADIE se ríe de Gab. Genial, ahora pienso en tercera persona, como el César éste de los romanos. Perfecto, eso es que mi ego ha crecido.
¡Espera! ¿Por qué viene hacia aquí? Aaaah, la venganza. ya, ya sé que no podré hacer nada contra él. Evidentemente, está más fuerte, pero si se pasa... Patada a los cojones, que seguro que acabamos el día de puta madre. Pero nada, no había nada que hacer. Él era más rápido, y mis reflejos siempre han estado cegados por las enormes cantidades de mierda que he metido en mi cuerpo.
Así que... ahogadilla al canto. Me revolví todo lo que pude, lanzando patadas a diestro y siniestro, no sé si acertando o atizando a los putos peces/zombies que hubiera por ahí. No por agobio, claro que no, era evidente que no me iba adejar morir, solo por joder, por resultar hiperactiva, porque estábamos haciendo algo que a mí no me gustaba hacer.
Y, efectivamente, no me equivoqué. Yo nunca me equivoco, señores. Duró aproximadamente unos segundos. Aún así, ha sido un capullo. Os juro que mi cerebro ya está tramando una peligrosa venganza contra todo aquello que tenga la cara de ese tío.
Lo observé salir, con su frasecita de los cojones, quedando irremediablemente bien. ¡Y no, eso a mí no me gusta! Así que, ahora que me voy a aburrir, prefiero salirme. Aunque ya le haya cogido el gustito al agua congelada.
Así que, a paso lento, llegué hasta la orilla, y salí. ¡Joder! ¡Qué frío! Estoy empapada. La camiseta de los cojones se me pega por todas partes, marcando demasiado. Los pantalones cortos chorrean, y se me hacen muy pesados. Y, como no tengo absolutamente nada más de ropa, a parte de las deportivas que he dejado de lado antes de meter los pies en el río, creo que voy a morir de congelación.
-Arrrrgggh,- fue lo único que musité antes de sentarme cerca de la orilla y abrazarme las piernas, dejando la cabeza sobre ellas, contemplando el transcurso del río. Sí, la venganza se sirve en plato frío. ¿Y quién se va a creer que yo, congelada e inocente estoy tramando algo? Cualquier hombre cauto, desde luego.
¡Já! Por Dios, me voy a descojonar, ahora intenta hacerse el orgulloso y digno. Por Dios, sin antes dirigirme ni una mirada... ¿Dónde coño está la gracia? Ah, sí, en el ostión que se ha metido. Recordadme que se lo recuerde durante toda su existencia.
Lo observé. Llevaba una cara de malas pulgas... Con su botellita de los cojones. Yo creo que va a morir envenenado si traga más agua de esta, de verdad. No se lo recomiendo a nad... Bueno, seeeeh, a él sí, que se ha reido de mí. Y NADIE se ríe de Gab. Genial, ahora pienso en tercera persona, como el César éste de los romanos. Perfecto, eso es que mi ego ha crecido.
¡Espera! ¿Por qué viene hacia aquí? Aaaah, la venganza. ya, ya sé que no podré hacer nada contra él. Evidentemente, está más fuerte, pero si se pasa... Patada a los cojones, que seguro que acabamos el día de puta madre. Pero nada, no había nada que hacer. Él era más rápido, y mis reflejos siempre han estado cegados por las enormes cantidades de mierda que he metido en mi cuerpo.
Así que... ahogadilla al canto. Me revolví todo lo que pude, lanzando patadas a diestro y siniestro, no sé si acertando o atizando a los putos peces/zombies que hubiera por ahí. No por agobio, claro que no, era evidente que no me iba adejar morir, solo por joder, por resultar hiperactiva, porque estábamos haciendo algo que a mí no me gustaba hacer.
Y, efectivamente, no me equivoqué. Yo nunca me equivoco, señores. Duró aproximadamente unos segundos. Aún así, ha sido un capullo. Os juro que mi cerebro ya está tramando una peligrosa venganza contra todo aquello que tenga la cara de ese tío.
Lo observé salir, con su frasecita de los cojones, quedando irremediablemente bien. ¡Y no, eso a mí no me gusta! Así que, ahora que me voy a aburrir, prefiero salirme. Aunque ya le haya cogido el gustito al agua congelada.
Así que, a paso lento, llegué hasta la orilla, y salí. ¡Joder! ¡Qué frío! Estoy empapada. La camiseta de los cojones se me pega por todas partes, marcando demasiado. Los pantalones cortos chorrean, y se me hacen muy pesados. Y, como no tengo absolutamente nada más de ropa, a parte de las deportivas que he dejado de lado antes de meter los pies en el río, creo que voy a morir de congelación.
-Arrrrgggh,- fue lo único que musité antes de sentarme cerca de la orilla y abrazarme las piernas, dejando la cabeza sobre ellas, contemplando el transcurso del río. Sí, la venganza se sirve en plato frío. ¿Y quién se va a creer que yo, congelada e inocente estoy tramando algo? Cualquier hombre cauto, desde luego.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Guardé la botella mojada en la mochila sin importarme una mierda si se me mojaba las cosas que tenía dentro, la verdad es que el hacerle la ahogadilla me había quitado un poco de la mala leche, pero aun asi sentía como me iba a reventar la famosa vena del cuello del mosqueo. La mierda de niñata... ¡Aaaaaaaaaaagggg! Se lo volvería a hacer una y otra vez pero tenía un frío de cojones y quería perderla de vista cuanto antes, pues si señores y señoras, era la primera vez en mi vida que quería perder de vista a una muchacha de tan buen ver y más aún con esa camiseta mojada que se marcaba y... ¡Concentración! No podía caer tan bajo.
Me puse en pie y me dispuse para irme de el radio de influencia de esa tía cuanto antes, radio que estimé en unos 5000 km. Una última mirada a ese demonio rubio, sentada mirando ausente el curso del río lo que me llevó a preguntarme... ¿Me había colado de verdad? No, ni por todo el oro del mundo podía pensar una cosa asi, recuerda Alex, esa rubia era peor que los fherals, estaba mas buena, pero mucho peor. Saqué de la mochila una botella de tequila casi vacía y le di un trago, nada más que para me quitara el sabor a mierda que tenía en la boca. Hecho esto, nada me retenía alli.
- Un placer.- dije con sorna, pues al fin y al cabo ella había acabado peor parada que yo.- Y deseáles suerte a los fherals que se encuentren contigo de mi parte.
Y empapado empecé a caminar siguiendo la ribera del río, en busca de algún refugio cerca del agua pues la noche estaba cayendo y no me apetecía internarme en las calles de la ciudad. Andube cinco minutos y paré a descansar...¿Que? Entre el tabaco y los 5000 kg que pesaba la ropa mojada estaba reventado. Saqué de la mochila, la camisa raída y manchada que llevaba puesta el primer día que llegue, no abrigaría mucho, pero al menos estaba seca, no, error, estaba casi seca pues la botella la había mojado algo.
Silbando una melodía, que me inventaba sobre la marcha gracias a una vena compositora que me salía de vez en cuando, me quite la chaqueta y camiseta y me puse la camisa que apestaba literalmente. Llegaba el momento de seguir avanzando, tal vez la chica esa fuera capaz de lanzar rayos por los ojos y me perseguía para matarme, tenía que seguir andando.
Me puse en pie y me dispuse para irme de el radio de influencia de esa tía cuanto antes, radio que estimé en unos 5000 km. Una última mirada a ese demonio rubio, sentada mirando ausente el curso del río lo que me llevó a preguntarme... ¿Me había colado de verdad? No, ni por todo el oro del mundo podía pensar una cosa asi, recuerda Alex, esa rubia era peor que los fherals, estaba mas buena, pero mucho peor. Saqué de la mochila una botella de tequila casi vacía y le di un trago, nada más que para me quitara el sabor a mierda que tenía en la boca. Hecho esto, nada me retenía alli.
- Un placer.- dije con sorna, pues al fin y al cabo ella había acabado peor parada que yo.- Y deseáles suerte a los fherals que se encuentren contigo de mi parte.
Y empapado empecé a caminar siguiendo la ribera del río, en busca de algún refugio cerca del agua pues la noche estaba cayendo y no me apetecía internarme en las calles de la ciudad. Andube cinco minutos y paré a descansar...¿Que? Entre el tabaco y los 5000 kg que pesaba la ropa mojada estaba reventado. Saqué de la mochila, la camisa raída y manchada que llevaba puesta el primer día que llegue, no abrigaría mucho, pero al menos estaba seca, no, error, estaba casi seca pues la botella la había mojado algo.
Silbando una melodía, que me inventaba sobre la marcha gracias a una vena compositora que me salía de vez en cuando, me quite la chaqueta y camiseta y me puse la camisa que apestaba literalmente. Llegaba el momento de seguir avanzando, tal vez la chica esa fuera capaz de lanzar rayos por los ojos y me perseguía para matarme, tenía que seguir andando.
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Fruncí el ceño. ¿Qué coño está haciendo el tío este? Aaaah, sí, guardar la botellita de los cojones. ¿Y ahora? Ah, seeh, me está mirando. Pero... acaba de sacar una botella. Sí, y todo esto lo he conseguido hacer desde la visión periférica, si es que soy un crack. Pero en cuanto mi cerebrillo a reaccionado ante la perspectiva de una botella, he tenido qu eclavar mi vista en el tío este. Joder, qué bien le sienta la camiseta mojaba. Baaah, Gab, no seas tan perver. ¡Genial, otra vez en tercera persona! Si es que soy toda un show. Aunque claro, solo para el que mire por mis "adentros".
¡Qué sí, coño, que ha sacado una botella de alcohol! Dios mío, este tío no sabe lo que ha echo. Ya, que no queda mucha, pero si consigo bebérmelo todo de un trago, me voy a pegar un colocón genial para olvidar. Y, ahora, es lo que más necesito.
Lo observé con carita de muñeca beber. Oh, Dios mío, creo que me va a dar algo. Necesito beber. Y creo que por esa simple razón voy a dejar la venganza para más tarde. Sí, este tío va a saber quien es la verdadera Gab. Puse cara abstracta (? cuando me dijo aquello. ¿Un placer? Baaah, este no se va a librar de mí tan facilmente, más que nada por la botella de alcohol que ha guardado en la mochila. Lo seguí con la vista hasta que se alejó lo suyo, sin responder siquiera a aquél comentario con tanta sorna, mordiéndome la lengua, solo pensando en el después. Me calcé con rapidez las zapatillas, olvidándome del frío d emi cuerpo. Si el tío era bueno, pronto todo aquello se olvidaría. Intenté despegarme un poco la camiseta del cuerpo, pero en cuanto la volví a sotar, volvió a su anterior estado, es decir, completamente pegada a mi cuerpecillo. Baaah, a tomar por culo.
Dibujé en mi cara la sonrisa más inocente que podáis imaginaros, y seguí sus pasos con rapidez, como un perrito. No me costó demasiado alcanzarlo, sobre todo porque aceleré el paso, pensando en el alcohol. El tío canta y todo... Multitareas. Me coloqué a su lado justo cuando se estaba cambiando de camisa. Ammmgs. Me abstengo de comentarios, tías.
-Cantas muy bien.-fue lo único que dije. Era un echo, ya, pero también una provocación. Era como decir: "Aquí me tienes de nuevo, capullo". Sí, muy extraño, pero mi forma de comunicarme. Le dediqué esa sonrisilla arrebatadora que me sale cuando me esfuerzo, completamente falsa, para, después, seguir caminando a paso lento junto a él.
Me dediqué a adecentarme un poco. Vale, imposible. Tengo un aspecto patético, que no deja demasiado lugar a la imaginación. Baaah, me da igual. Soy encantadora, y, por consecuente, me dará un traguito.
¡Qué sí, coño, que ha sacado una botella de alcohol! Dios mío, este tío no sabe lo que ha echo. Ya, que no queda mucha, pero si consigo bebérmelo todo de un trago, me voy a pegar un colocón genial para olvidar. Y, ahora, es lo que más necesito.
Lo observé con carita de muñeca beber. Oh, Dios mío, creo que me va a dar algo. Necesito beber. Y creo que por esa simple razón voy a dejar la venganza para más tarde. Sí, este tío va a saber quien es la verdadera Gab. Puse cara abstracta (? cuando me dijo aquello. ¿Un placer? Baaah, este no se va a librar de mí tan facilmente, más que nada por la botella de alcohol que ha guardado en la mochila. Lo seguí con la vista hasta que se alejó lo suyo, sin responder siquiera a aquél comentario con tanta sorna, mordiéndome la lengua, solo pensando en el después. Me calcé con rapidez las zapatillas, olvidándome del frío d emi cuerpo. Si el tío era bueno, pronto todo aquello se olvidaría. Intenté despegarme un poco la camiseta del cuerpo, pero en cuanto la volví a sotar, volvió a su anterior estado, es decir, completamente pegada a mi cuerpecillo. Baaah, a tomar por culo.
Dibujé en mi cara la sonrisa más inocente que podáis imaginaros, y seguí sus pasos con rapidez, como un perrito. No me costó demasiado alcanzarlo, sobre todo porque aceleré el paso, pensando en el alcohol. El tío canta y todo... Multitareas. Me coloqué a su lado justo cuando se estaba cambiando de camisa. Ammmgs. Me abstengo de comentarios, tías.
-Cantas muy bien.-fue lo único que dije. Era un echo, ya, pero también una provocación. Era como decir: "Aquí me tienes de nuevo, capullo". Sí, muy extraño, pero mi forma de comunicarme. Le dediqué esa sonrisilla arrebatadora que me sale cuando me esfuerzo, completamente falsa, para, después, seguir caminando a paso lento junto a él.
Me dediqué a adecentarme un poco. Vale, imposible. Tengo un aspecto patético, que no deja demasiado lugar a la imaginación. Baaah, me da igual. Soy encantadora, y, por consecuente, me dará un traguito.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
La vocecita que sonó a mis espaldas me hizo dar un respingo. Mis peores temores se habían confirmado, el monstruo rubio de rayos azules por los ojos me había alcanzado. Era esa descripción o la de rubia mojada tremendamente sexy... y de lo poco o de lo nada que la conocía encajaba mejor en la del monstruo. Era como la famosa Medusa de los romanos o los egipcios, si la miras a los ojos estas perdido. Pues eso, que me encontraba de mal humor y jodido porque de lo último que tenía ganas era de soportar a esa muchacha.
La sonrisa que me dedicó era como la calma que precede a la tempestad, peligrosa. Terminé de abrocharme la camisa y me limpie algo de barro que tenía en la frente ya medio seco. Cogí la mochila y le dije yendo directamente al grano y obviando el hecho de que la muchacha parecía que no distinguía entre silbar y cantar:
- Vamos a ver, ¿Qué tengo que hacer para que me dejes en paz? Lo siento, dudo que lo nuestro fuera amor a primera vista. Además me temo que no sería lo suficientemente bueno para ti- dije sarcásticamente y con media sonrisa que no acompañaron mis ojos.
Lo que me pidiera a cambio de mi libertad, pues evidentemente no se lo iba a dar, que se jodiera el monstruo de los rayos, si quería ser un mendigo profesional que hiciera un cartelito de esos de cartón, si quería comida, hierba tenía de sobra, si quería un amigo que comprara uno en las rebajas, si quería bebida ahí tenía un río. ¿Qué podía querer de mi? Favores sexuales tal vez, recuerda compi, es el monsturo de los rayos.
Aparté todo pensamiento de mi mente pero la camisetá mojada venía una y otra vez, necesitaba estar listo para la gran batalla que se avecinaba, pues dudaba que la rubia se fuera sin pelear ya fuera física o dialecticamente. Me metí las manos en los bolsillos y pregunte:
- ¿Quieres un caramelo? A lo mejor tengo alguno de limón para tí.- añadí finalmente manteniendo esa pinta de chulo que tanto me había costado conseguir. Para chulo chulo, mi... todos sabeis como termina, ¿no? Pues eso, que esa chica me había puesto de muy mala leche y encima venía a por mas
La sonrisa que me dedicó era como la calma que precede a la tempestad, peligrosa. Terminé de abrocharme la camisa y me limpie algo de barro que tenía en la frente ya medio seco. Cogí la mochila y le dije yendo directamente al grano y obviando el hecho de que la muchacha parecía que no distinguía entre silbar y cantar:
- Vamos a ver, ¿Qué tengo que hacer para que me dejes en paz? Lo siento, dudo que lo nuestro fuera amor a primera vista. Además me temo que no sería lo suficientemente bueno para ti- dije sarcásticamente y con media sonrisa que no acompañaron mis ojos.
Lo que me pidiera a cambio de mi libertad, pues evidentemente no se lo iba a dar, que se jodiera el monstruo de los rayos, si quería ser un mendigo profesional que hiciera un cartelito de esos de cartón, si quería comida, hierba tenía de sobra, si quería un amigo que comprara uno en las rebajas, si quería bebida ahí tenía un río. ¿Qué podía querer de mi? Favores sexuales tal vez, recuerda compi, es el monsturo de los rayos.
Aparté todo pensamiento de mi mente pero la camisetá mojada venía una y otra vez, necesitaba estar listo para la gran batalla que se avecinaba, pues dudaba que la rubia se fuera sin pelear ya fuera física o dialecticamente. Me metí las manos en los bolsillos y pregunte:
- ¿Quieres un caramelo? A lo mejor tengo alguno de limón para tí.- añadí finalmente manteniendo esa pinta de chulo que tanto me había costado conseguir. Para chulo chulo, mi... todos sabeis como termina, ¿no? Pues eso, que esa chica me había puesto de muy mala leche y encima venía a por mas
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Já, acababa de dar un respingo. ¿Tanto miedo doy? Pues debe de ser así. A nadie le gusta verme dos veces, por Dios, con lo guapa que soy. En fin, ¿qué le vamos a hacer? A mí personalmente me importa poco.
Me dediqué exclusivamente a caminar, pese a que algo le pasaba a mi pie. Sí, desde la caída no estaba en sus mejores momentos, desgraciadamente. Pero a mí me da igual, yo por un poco de alcohol hago lo que sea. Lo que sea, y no me importan ni las consecuencias ni los medios. Así que mantuve mi gran bocaza cerrada a cal y canto, esperando a que dijera algo a lo que yo pudiera contestarle con amabilidad.
¡Joder! El tío me lo pone difícil ¿eeeh? ¿No puede estarse calladito para que esto sea más fácil para mí? Lo dudo, joder, que tío. Me mordí la lengua. Venga baaaah, Gab, por favor. Alcohol, alcohol.
-Ya, eso tenlo por seguro, no eres demasiado bueno para mí.- musité, haciendo un esfuerzo tremendo por callarme. Ya, que tampoco había sacado mi artillería pesada, pero si no abro la boca, creo que aquí en medio me da un patatús. Además, los sarcasmos me ponen mala, si no soy yo la creadora, claro está. Inspiré, espiré, inspiré, espiré.
Pasaron unos segundos en los que reinaba el silencio. A ver si no vuelve a abrir esa gran bocaza suya... Vale, no, no ha habido suerte. ¿Un caramelo? Me cago en la gran puta, me está vacilando otra vez.
-A mí me van más los de menta, tío.- argumenté con voz monocorde. Dios, si me salgo de ese tonito creo que voy a explotar, y tengo la mecha corta. Me mordí el labio inferior. Arrrrgh. Cada vez odio más a ese tío, ¡qué cabronazo! Me he quedado con su cara, que conste, cuando tenga un arma le voy a cortar los huevos.
Sí, creo que voy a centrarme en que me duele el pie cada vez que me apoyo, a ver si me relajo. Dios, creo que voy a dejar de apoyarlo, que paso de agonizar. Arrggh. Supongo que por eso en estos momentos estoy patéticamente mojada y medio cojeando. Dios mío, pobre d emí. ¿No le daré pena al tío este y me dará un sorbito? No habrá esa suerte.
Me dediqué exclusivamente a caminar, pese a que algo le pasaba a mi pie. Sí, desde la caída no estaba en sus mejores momentos, desgraciadamente. Pero a mí me da igual, yo por un poco de alcohol hago lo que sea. Lo que sea, y no me importan ni las consecuencias ni los medios. Así que mantuve mi gran bocaza cerrada a cal y canto, esperando a que dijera algo a lo que yo pudiera contestarle con amabilidad.
¡Joder! El tío me lo pone difícil ¿eeeh? ¿No puede estarse calladito para que esto sea más fácil para mí? Lo dudo, joder, que tío. Me mordí la lengua. Venga baaaah, Gab, por favor. Alcohol, alcohol.
-Ya, eso tenlo por seguro, no eres demasiado bueno para mí.- musité, haciendo un esfuerzo tremendo por callarme. Ya, que tampoco había sacado mi artillería pesada, pero si no abro la boca, creo que aquí en medio me da un patatús. Además, los sarcasmos me ponen mala, si no soy yo la creadora, claro está. Inspiré, espiré, inspiré, espiré.
Pasaron unos segundos en los que reinaba el silencio. A ver si no vuelve a abrir esa gran bocaza suya... Vale, no, no ha habido suerte. ¿Un caramelo? Me cago en la gran puta, me está vacilando otra vez.
-A mí me van más los de menta, tío.- argumenté con voz monocorde. Dios, si me salgo de ese tonito creo que voy a explotar, y tengo la mecha corta. Me mordí el labio inferior. Arrrrgh. Cada vez odio más a ese tío, ¡qué cabronazo! Me he quedado con su cara, que conste, cuando tenga un arma le voy a cortar los huevos.
Sí, creo que voy a centrarme en que me duele el pie cada vez que me apoyo, a ver si me relajo. Dios, creo que voy a dejar de apoyarlo, que paso de agonizar. Arrggh. Supongo que por eso en estos momentos estoy patéticamente mojada y medio cojeando. Dios mío, pobre d emí. ¿No le daré pena al tío este y me dará un sorbito? No habrá esa suerte.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
¿Le temblaba el labio al monstruo? Jajajaja, si le estaba temblando. La victoria estaba cerca, un par de frases más y pufff, explotaría su linda cabecita. Parpadeé volviendo a la realidad, demasiada televisión había visto en mi vida y ahora lo estaba pagando con esas paranoias mentales. La cuestión es que aún no me había dicho que coño quería de mi, lo más seguro era que tuviera ganas de tocarme la moral pero si se ponía demasiado pesada echaría a correr. Vale, que ya se que no aguanto una mierda corriendo, pero más que una coja yo creo que si, ¿no? Porque ese era otro tema, la chica parecía realmente coja o eso, o antes de venir a para aqui era actriz de hollywood. Esperaaaa ¿la chica? joder, ya estaba dejando de pensar en ella como el monstruo de los rayos, mala señal.
- Si no me dices que es lo que quieres, me da la impresión de que no te voy a poder perder de vista. Dímelo y acabemos cuanto antes.
Nada, que allí seguía sin dignarse a decir nada más que caramelos de menta, de verdad que me empezaba a hinchar las narices que se me quedara mirando sin hablar. Y algo me decía que me seguiría hasta que no obtuviera lo que su perturbada cabeza le pedía. Pues nada, un día completito, solo faltaba una fiesta de fherals bailando reggaeton en los alrededores. Tuve que sacar mi amiga la botella de tequila, le di un sorbo... joder, que poco me estaba durando, apenas quedaba el fondo de la botella.
Le volví a poner el tapón y la metí en la mochila, una vez repuesto el combustible me quedé mirando a la chica sin decir nada. Si era una carrera de resistencia, estaba dispuesto a ganarla pues era yo el que tenía provisiones y estaba en plenas facultades físicas o no tan plenas pero si suficientes para hacer frente la paciencia de esa tía. La noche se había echado encima y soplaba una ligera brisa bastante fresquita, se me puso la piel de gallina pues aun tenía los pantalones y el pelo mojado, no me podía ni imaginar por lo que estaba pasando esa muchacha.
Tic, tac, tic, tac, me aburroooo. Menudos dos gilipoyas que estabamos hechos los dos, ella más que yo, pero mi cabezonería me rebajaba a su altura practicamente. A este ritmo, nos convertiriámos en fósiles en la misma posición en la estabamos. ¿Cuanto tiempo llevamos asi? Un minuto, dos minutos, si no fuera porque esta tan buena no habría aguantado ni medio segundo mirándola. Tic, tac...
- Si no me dices que es lo que quieres, me da la impresión de que no te voy a poder perder de vista. Dímelo y acabemos cuanto antes.
Nada, que allí seguía sin dignarse a decir nada más que caramelos de menta, de verdad que me empezaba a hinchar las narices que se me quedara mirando sin hablar. Y algo me decía que me seguiría hasta que no obtuviera lo que su perturbada cabeza le pedía. Pues nada, un día completito, solo faltaba una fiesta de fherals bailando reggaeton en los alrededores. Tuve que sacar mi amiga la botella de tequila, le di un sorbo... joder, que poco me estaba durando, apenas quedaba el fondo de la botella.
Le volví a poner el tapón y la metí en la mochila, una vez repuesto el combustible me quedé mirando a la chica sin decir nada. Si era una carrera de resistencia, estaba dispuesto a ganarla pues era yo el que tenía provisiones y estaba en plenas facultades físicas o no tan plenas pero si suficientes para hacer frente la paciencia de esa tía. La noche se había echado encima y soplaba una ligera brisa bastante fresquita, se me puso la piel de gallina pues aun tenía los pantalones y el pelo mojado, no me podía ni imaginar por lo que estaba pasando esa muchacha.
Tic, tac, tic, tac, me aburroooo. Menudos dos gilipoyas que estabamos hechos los dos, ella más que yo, pero mi cabezonería me rebajaba a su altura practicamente. A este ritmo, nos convertiriámos en fósiles en la misma posición en la estabamos. ¿Cuanto tiempo llevamos asi? Un minuto, dos minutos, si no fuera porque esta tan buena no habría aguantado ni medio segundo mirándola. Tic, tac...
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
¿Qué que quiero? Muchas cosas, desde luego. Pero lo primero es lo primero. Yo quiero beber, y el tiene una botella. Ya he conseguido tocarle los cojones hasta que acabe preguntándome lo que quiero. Bueno, yo esperaba que nos conociéramos a fondo y que entablásemos una preciosa amistad, pero creo que eso no podrá llegar a ser. En fin, mis planes futuros se han ido al traste. Ahora solo me queda esperar a que mi malvado cerebrillo encuentre un buen argumento. O bueno, también puedo pedirlo a lo burro, está claro. Además, yo puedo tener los métodos de convicción que él quiera, pero la cosa está en empezar a jugar ya.
¡Dios! ¡Qué cabrón! Va y le da un trago, con la poca que queda. Ammmms, tequila. Bueno, no es lo que más me gusta, evidentemente, pero mientras lleve algo de alcohol, bienvenido sea. Fruncí el ceño, esperando a que acabara, presentándome con una sonrisita lo más inocente posible. Creo que esta cara me sienta mejor que la de la sonrisa irónica, pero pero que la de tigresa (?. En fin, ya llegará el momento de poner cada una de ellas, ahora solo me voy a hacer la buena, que con eso se consiguen muchas cosas. En cuanto guardó la botella, entré en acción, como si todo eso lo tuviese milimétricamente ensallado.
-En fin, guapo, es que creo que no hemos empezado con muy buen pie. Soy Gabrielle.- y, ni corta ni perezosa, me lancé hacia él, dispuesta a darle dos besos en las mejillas. Ya, es así como nos presentamos en mi país. Já, si es que hay que joderse. Con lo que lo odio en estos momentos, y tengo que pincharme con la puta barbita en mi piel de porcelana. Eso no mola. Ya, ya sé que tenía los labios un poco húmedos aún del agua, pero en fin, tampoco creo que sea tan desagradable. Es una pena que no haya comenzado eseñándome la botellita de los cojones, así nos habríamos ahorrado las gilipolleces.
-En fin, ¿Y usted no sería tan caballeroso de darle a una pobre dama un inocente trago de eso? Tequila, creo que se llama.- y así me descubrí, dibujando en mi cara una sonrisita de niña pilla a la que le han encontrado haciendo algo malo. No suelo utilizar estas tácticas tan encantadoras, lo mío es a lo burro, pero, tristemente, no tengo ningún arma con la que apuntar a la cabeza a nadie, y tengo que utilizar todo mi potencial en hacer la cursi y la gilipollas. Es que hay que joderse, de verdad.
¡Dios! ¡Qué cabrón! Va y le da un trago, con la poca que queda. Ammmms, tequila. Bueno, no es lo que más me gusta, evidentemente, pero mientras lleve algo de alcohol, bienvenido sea. Fruncí el ceño, esperando a que acabara, presentándome con una sonrisita lo más inocente posible. Creo que esta cara me sienta mejor que la de la sonrisa irónica, pero pero que la de tigresa (?. En fin, ya llegará el momento de poner cada una de ellas, ahora solo me voy a hacer la buena, que con eso se consiguen muchas cosas. En cuanto guardó la botella, entré en acción, como si todo eso lo tuviese milimétricamente ensallado.
-En fin, guapo, es que creo que no hemos empezado con muy buen pie. Soy Gabrielle.- y, ni corta ni perezosa, me lancé hacia él, dispuesta a darle dos besos en las mejillas. Ya, es así como nos presentamos en mi país. Já, si es que hay que joderse. Con lo que lo odio en estos momentos, y tengo que pincharme con la puta barbita en mi piel de porcelana. Eso no mola. Ya, ya sé que tenía los labios un poco húmedos aún del agua, pero en fin, tampoco creo que sea tan desagradable. Es una pena que no haya comenzado eseñándome la botellita de los cojones, así nos habríamos ahorrado las gilipolleces.
-En fin, ¿Y usted no sería tan caballeroso de darle a una pobre dama un inocente trago de eso? Tequila, creo que se llama.- y así me descubrí, dibujando en mi cara una sonrisita de niña pilla a la que le han encontrado haciendo algo malo. No suelo utilizar estas tácticas tan encantadoras, lo mío es a lo burro, pero, tristemente, no tengo ningún arma con la que apuntar a la cabeza a nadie, y tengo que utilizar todo mi potencial en hacer la cursi y la gilipollas. Es que hay que joderse, de verdad.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
¿Guapo?¿Buen pie? Manda cojones la cosa, ahora resulta que era la Madre Teresa de Calcuta disfrazada y yo sin darme cuenta. Esa situación había traspasado los límites de la realidad hacía rato, en el momento en que entró en escena el monstruo, y ahora navegaba sin rumbo en un mar de fantasía. Solo faltaba que la chica se quitara la máscara y resultara ser un gato o algo por el estilo, total mucho más arisca no iba a ser. En fin, que entre gatos y máscaras escuché finalmente el nombre la chica, Gabrielle, un nombre bonito, lástima que la primera Gabrielle que conociera hubiera sido "esa" Gabrielle.
- Ajam.- dije cuando se presentó ella, mostrando toda la indiferencia que realmente sentía. De ella solo me interesaba perderla de vista y tal vez, repito, tal vez y una vez mas por si acaso, tal vez sus atributos femeninos marcados en la camiseta. Y obviamente le impedí que se acercara a mi a abrazarme o algo así que venía a hacer.
¿Le decía mi nombre? Si ella estaba por las buenas, tal vez yo debería hacer un esfuerzo y... ¡ni hablar! Era todo fachada, en cuanto tuviera lo que quería seguramente me arrancaría el corazón y se lo zamparía de un bocado. Eso, me tenía que mantener en mis trece capaz de tirar un muro a cabezazos si hacía falta. Nada, para que voy a negarlo más tiempo si al final no vale para nada, tiran más... para que seguir. Maldita sea, no era justo. Aún asi era capaz de mantener mi fachada de piedra un rato más lo sufuciente para que se marchase.
- Yo soy Alexander y eres tu la que no tiene el buen pie.- dije mirando su pie herido, tobillo torcido o roto según el cuento de que le echase.
Era un comienzo, a medio camino entre la bandera blanca de la tregua y los tambores de guerra. Un segundo comienzo, me obligué a recordar. Pero todas mis buenas intenciones se fueron por el retrete cuando me dijo que era lo que quería, el alcohol, MI alcohol. Ni de coña, ni por todo el oro del mundo, ni por una noche de pasión desenfrenada... para el carro, por lo último tal vez si. De la manera que fuera, si me había impuesto una política neutral de sin frio y sin calor la tenía que seguir. Así que saqué la botella, tiré al suelo lo poco que quedaba menos un minisorbo y le dí la botella:
- Ahí tienes un sorbo, ¿te puedo ayudar en algo mas?
- Ajam.- dije cuando se presentó ella, mostrando toda la indiferencia que realmente sentía. De ella solo me interesaba perderla de vista y tal vez, repito, tal vez y una vez mas por si acaso, tal vez sus atributos femeninos marcados en la camiseta. Y obviamente le impedí que se acercara a mi a abrazarme o algo así que venía a hacer.
¿Le decía mi nombre? Si ella estaba por las buenas, tal vez yo debería hacer un esfuerzo y... ¡ni hablar! Era todo fachada, en cuanto tuviera lo que quería seguramente me arrancaría el corazón y se lo zamparía de un bocado. Eso, me tenía que mantener en mis trece capaz de tirar un muro a cabezazos si hacía falta. Nada, para que voy a negarlo más tiempo si al final no vale para nada, tiran más... para que seguir. Maldita sea, no era justo. Aún asi era capaz de mantener mi fachada de piedra un rato más lo sufuciente para que se marchase.
- Yo soy Alexander y eres tu la que no tiene el buen pie.- dije mirando su pie herido, tobillo torcido o roto según el cuento de que le echase.
Era un comienzo, a medio camino entre la bandera blanca de la tregua y los tambores de guerra. Un segundo comienzo, me obligué a recordar. Pero todas mis buenas intenciones se fueron por el retrete cuando me dijo que era lo que quería, el alcohol, MI alcohol. Ni de coña, ni por todo el oro del mundo, ni por una noche de pasión desenfrenada... para el carro, por lo último tal vez si. De la manera que fuera, si me había impuesto una política neutral de sin frio y sin calor la tenía que seguir. Así que saqué la botella, tiré al suelo lo poco que quedaba menos un minisorbo y le dí la botella:
- Ahí tienes un sorbo, ¿te puedo ayudar en algo mas?
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Me impidió acercarme. Vaaah, a mí personalmente me da igual. Cuando antes se acabe esta tortura muchísimo mejor. Me encogí sobre mí misma, mientras él hacía sus cálculos mentales. Seeeh, ya, es que cambios tan bruscos de personalidad asustan la hostia, digo yo. En fin. Rodé los ojos lentamente, observando el paisaje. Tan desolador como siempre. Pues eso. ¡Joder, y encima el tío se hace el gracioso y todo! ¿No entiende que es un momento jodidamente delicado y difícil para mí? Bueno, si lo entendiera, ya no haría falta seguir haciendo el gilipollas porque todo mi encanto se hubiese ido a la mierda.
-Já.- lo siento, es superior a mis fuerzas. Si no abro la boca para ser irónica reviento. Hombre, se supone que eso ha sido un intento de risa por mi parte, que se burla de su broma, pero se puede interpretar como queráis, que a mí me da igual. Por cierto, ha dicho Alexander ¿no? Sí, yo he conocido a un par de Alenxander´s. No ha fondo, por supuesto, hace mucho que no conozco a nadie a fondo, pero me da igual, lo suyo es que no me es un nombre desconocido. Creo que alguna vez hice una carrera en moto con alguno de esos Alexander´s. Vaaah, ahora no me acuerdo, por Dios.
¡Espera, espera! ¿Qué está haciendo? Ha sacado la botella. ¿Me la va a dar? ¿Tan fácilmente? Imposible, está tramando algo. ¿¡PERO QUÉ COÑO HACE?! ¿¡Por qué desperdicia alcohol?! Cabrón, hijo de puta, malnacido, gilipollas. Arrrggggh. Lo odio. Lo ODIO. ¿Se ha quedado a gusto?. Ya verá lo que es meterse conmigo. ¡Lo voy a castrar a ostias!
Cogí la botella rápidamente, ágil, llevada por la rabia. En condiciones normales, yo no hubiese tenido nada que hacer, en estas condiciones, no sabe como lo voy a dejar. Gruñí, como un perro marcando su territorio. Se ha pasado, y ahora me lo va a pagar. Entrecerré los ojillos. Tensé los gemelos. Ya no había vuelta atrás. Salté hacia él, con las uñas de una mano por delante, y la botella en la otra, esperando a explotársela en la cabeza. Lo que despué spasó, lo tengo demasiado confuso. Sé que caí sobre él, sé que pataleé como una posesa, sé que arañé todo lo que encontraba a mi paso, sé que acabé en el suelo, y sé que exploté la botella en algún sitio. Ya no sé nada más.
-Já.- lo siento, es superior a mis fuerzas. Si no abro la boca para ser irónica reviento. Hombre, se supone que eso ha sido un intento de risa por mi parte, que se burla de su broma, pero se puede interpretar como queráis, que a mí me da igual. Por cierto, ha dicho Alexander ¿no? Sí, yo he conocido a un par de Alenxander´s. No ha fondo, por supuesto, hace mucho que no conozco a nadie a fondo, pero me da igual, lo suyo es que no me es un nombre desconocido. Creo que alguna vez hice una carrera en moto con alguno de esos Alexander´s. Vaaah, ahora no me acuerdo, por Dios.
¡Espera, espera! ¿Qué está haciendo? Ha sacado la botella. ¿Me la va a dar? ¿Tan fácilmente? Imposible, está tramando algo. ¿¡PERO QUÉ COÑO HACE?! ¿¡Por qué desperdicia alcohol?! Cabrón, hijo de puta, malnacido, gilipollas. Arrrggggh. Lo odio. Lo ODIO. ¿Se ha quedado a gusto?. Ya verá lo que es meterse conmigo. ¡Lo voy a castrar a ostias!
Cogí la botella rápidamente, ágil, llevada por la rabia. En condiciones normales, yo no hubiese tenido nada que hacer, en estas condiciones, no sabe como lo voy a dejar. Gruñí, como un perro marcando su territorio. Se ha pasado, y ahora me lo va a pagar. Entrecerré los ojillos. Tensé los gemelos. Ya no había vuelta atrás. Salté hacia él, con las uñas de una mano por delante, y la botella en la otra, esperando a explotársela en la cabeza. Lo que despué spasó, lo tengo demasiado confuso. Sé que caí sobre él, sé que pataleé como una posesa, sé que arañé todo lo que encontraba a mi paso, sé que acabé en el suelo, y sé que exploté la botella en algún sitio. Ya no sé nada más.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
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Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Mierda, mierda y tres veces mierda, aquella psicópata había entrado en un frenesí asesino que nunca había visto reflejado en los ojos de ningún otro ser humano antes. Pero eso sólo lo vi dos segundos mientras se preparaba para atacarme, ¿Habría tirado alcohol al suelo o había sido oro líquido? Puta yonki de mierda fué mi último pensamiento lúcido antes de que el monstruo de los rayos me atacara de verdad. ¡Coño! Era rápìda de cojones para estar coja, no fuí capaz ni de mover un músculo cuando ví que se venía para mí botella en mano dispuesta a abrirme la cabeza. Sin comerlo ni beberlo, estaba en una lucha por mi vida.
Se tiró contra mi con una fuerza inesperada que hizo ambos cayéramos al suelo, ella encima de mi y no me había repuesto del golpe cuando sentí que algo me arañaba la mejilla... la muy puta iba a dar guerra. Ups, había olvidado que tenía la botella en la otra mano, ¡joder! que botellazo me iba a llevar en la cara, por puro instinto puse ambos brazos delante de mi. La acción sirvió para salvar mi cara pero a cambio empecé a sentir un lacerante dolor en ambos brazos, donde numerosas esquirlas de cristral clavadas en la piel. Al menos amenaza de la botella había sido eliminada. Pero los arañazos y las patadas que aunque no dolían demasiado y me molestaban para moverme e intentar lograr el control de la situación.
Era cuanto menos curioso como una chica mas pequeña y débil que yo me tenía contra las cuerdas. Yo ni había podido pasar a la ofensiva pero eso se iba a acabar. No sé muy bien lo que hice si le di un tortazo, empujón o sabe Dios, pero el resultado fue que gané el suficiente espacio para rodar hacía el lado y ella que antes estaba encima mío, ahora quedó debajo de mi. Misma posición, papeles invertidos. Seguía pataleando y revolviendose con uñas y dientes, pero me temía que yo al tener más fuerza y corpulencia ya había ganado la batalla. Aún asi, era casi de admirar la tenacidad de la chica en rajarme de arriba a abajo.
Cerré el puño y le di en la cara un puñetazo. Ostia, estaba pegando a una chica... no, no, dejó de ser un ser humano cuando me atacó, si eso es, pero aun asi no me sentía bien. Un puñetazo era suficiente. Como pude le agarré las muñecas y se las sujeté contra el suelo, sus pataletas no suponían un problema inmediato. Asi que sentado sobre su vientre y con las manos sujetas le dije:
- O te tranquilizas o te voy a tener que dar una paliza.- Intenté sonar lo más tranquilo que pude, cosa imposible y sobre todo seguro de que cumpliría con mi amenaza. Es decir, no sabía si sería capaz de pegarle hasta la extenuación, nunca había dado una paliza a nadie, como mucho las había ordenado que era diferente, no te manchabas tus nudillos de sangre y para la conciencia era mucho más fácil de perdonar.
Se tiró contra mi con una fuerza inesperada que hizo ambos cayéramos al suelo, ella encima de mi y no me había repuesto del golpe cuando sentí que algo me arañaba la mejilla... la muy puta iba a dar guerra. Ups, había olvidado que tenía la botella en la otra mano, ¡joder! que botellazo me iba a llevar en la cara, por puro instinto puse ambos brazos delante de mi. La acción sirvió para salvar mi cara pero a cambio empecé a sentir un lacerante dolor en ambos brazos, donde numerosas esquirlas de cristral clavadas en la piel. Al menos amenaza de la botella había sido eliminada. Pero los arañazos y las patadas que aunque no dolían demasiado y me molestaban para moverme e intentar lograr el control de la situación.
Era cuanto menos curioso como una chica mas pequeña y débil que yo me tenía contra las cuerdas. Yo ni había podido pasar a la ofensiva pero eso se iba a acabar. No sé muy bien lo que hice si le di un tortazo, empujón o sabe Dios, pero el resultado fue que gané el suficiente espacio para rodar hacía el lado y ella que antes estaba encima mío, ahora quedó debajo de mi. Misma posición, papeles invertidos. Seguía pataleando y revolviendose con uñas y dientes, pero me temía que yo al tener más fuerza y corpulencia ya había ganado la batalla. Aún asi, era casi de admirar la tenacidad de la chica en rajarme de arriba a abajo.
Cerré el puño y le di en la cara un puñetazo. Ostia, estaba pegando a una chica... no, no, dejó de ser un ser humano cuando me atacó, si eso es, pero aun asi no me sentía bien. Un puñetazo era suficiente. Como pude le agarré las muñecas y se las sujeté contra el suelo, sus pataletas no suponían un problema inmediato. Asi que sentado sobre su vientre y con las manos sujetas le dije:
- O te tranquilizas o te voy a tener que dar una paliza.- Intenté sonar lo más tranquilo que pude, cosa imposible y sobre todo seguro de que cumpliría con mi amenaza. Es decir, no sabía si sería capaz de pegarle hasta la extenuación, nunca había dado una paliza a nadie, como mucho las había ordenado que era diferente, no te manchabas tus nudillos de sangre y para la conciencia era mucho más fácil de perdonar.
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
¡Dios! ¿Tanta fuerza tengo? Caímos al suelo, empujados, a parte de por mí, por la fuerza de gravedad. El batacazo que él se llevó no fue pequeño. Yo ni siquiera lo sentí, debido a que me encontraba sobre una colchoneta muy blandita. Todo lo demás... Está confuso. Más que nada porque yo no era la que sentía los golpes que asestaba con toda la fuerza que era capaz. ¿Y sabéis? La mayoría daban en el blanco. Pero a cada patada me costaba más respirar. ¡Menuda mierda de tabaco y/o porros! La fuerza se me iba a cada arañazo, y el ímpetu quedó tan roto como la botella. En los últimos golpes empecé a jadear. ¡Oh, Dios mío, esto va a acabar mal!
Y, efectivamente, aquél tío tomó rápidamente el control de la situación. Me empujó con fiiereza, y consiguió el puesto ganador. Era grande, fuerte y corpulento. Ahora ya no puedo ni recordar de donde he sacado la fuerza para tirarlo al suelo.
¡Joder, joder, qué cierra el puño! Mierda. Primer impacto. En toda la mandíbula. Me quedé sin poder respirar unos míseros instantes. ¡Cómo dolía aquello! Yo creo que me ha descuadrado algo, joder. Intenté boquear, sin conseguirlo. Solo intentar mover la boca me dolía horrores. ¡Joder! ¿Es qué esos pinchazos iban a seguir ahí todo el día? Dios, que puto dolor.
Noté un sabor metálico y caliente. Sangre, es sangre. ¡Coño! Bueno, ahora lo que tengo que hacer es abrir la boca, joder, como si me hubieran dado pocas de esos puñetazos.
Giré la cabeza, lo poco que me permitía la posición del cabronazo aquél. ¿Cómo había dicho que se llamaba? Alexander, creo.
Entreabrí la boca lo mínimo, ya que cada movimiento era un nuevo y agudo dolor. Y, efectivamente, al abrir la boca, salió un hilillo de sangre. Arrrgggh. Tosí momentaneamente. Bueno, por lo menos, todo el frío que tenía había decidido marcharse.
Volví a girar la cabeza, para mirar directamente a aquél tío. No me voy a rendir tan fácilmente. Soy bastaaaante cabezona. Así que, ante su amenaza de mucho dolor asegurado, me limité a gruñir como un perro. Sí, lo mío es masoquismo, porque aquí, como no tengo ni drogas, ni alcohol, ni velocidad, el dolor será lo único que me hará olvidar. Qué triste, pero es así.
Volví a gruñir, esta vez con más insistencia. Vale, ¿no se aparta? Va a ver lo que es sufrir. El agonizante dolor se había ido apagando, y ya no salía sangre de mi boca. Así que, rápida como yo sola, llevé mis labios a su cuello, entreabrí la boca, y la volí a cerrar. Con la única diferencia en la que ahora, había un trozo su carne entre mis dientes. Apreté, tiré y forcejeé, y todo eso, con un dolor terrible de boca. Supongo que por esa sencilla razón, no pude lucirme completamente, y tuve que soltar rápidamente mi víctima. ¡Cabrón!
Y, efectivamente, aquél tío tomó rápidamente el control de la situación. Me empujó con fiiereza, y consiguió el puesto ganador. Era grande, fuerte y corpulento. Ahora ya no puedo ni recordar de donde he sacado la fuerza para tirarlo al suelo.
¡Joder, joder, qué cierra el puño! Mierda. Primer impacto. En toda la mandíbula. Me quedé sin poder respirar unos míseros instantes. ¡Cómo dolía aquello! Yo creo que me ha descuadrado algo, joder. Intenté boquear, sin conseguirlo. Solo intentar mover la boca me dolía horrores. ¡Joder! ¿Es qué esos pinchazos iban a seguir ahí todo el día? Dios, que puto dolor.
Noté un sabor metálico y caliente. Sangre, es sangre. ¡Coño! Bueno, ahora lo que tengo que hacer es abrir la boca, joder, como si me hubieran dado pocas de esos puñetazos.
Giré la cabeza, lo poco que me permitía la posición del cabronazo aquél. ¿Cómo había dicho que se llamaba? Alexander, creo.
Entreabrí la boca lo mínimo, ya que cada movimiento era un nuevo y agudo dolor. Y, efectivamente, al abrir la boca, salió un hilillo de sangre. Arrrgggh. Tosí momentaneamente. Bueno, por lo menos, todo el frío que tenía había decidido marcharse.
Volví a girar la cabeza, para mirar directamente a aquél tío. No me voy a rendir tan fácilmente. Soy bastaaaante cabezona. Así que, ante su amenaza de mucho dolor asegurado, me limité a gruñir como un perro. Sí, lo mío es masoquismo, porque aquí, como no tengo ni drogas, ni alcohol, ni velocidad, el dolor será lo único que me hará olvidar. Qué triste, pero es así.
Volví a gruñir, esta vez con más insistencia. Vale, ¿no se aparta? Va a ver lo que es sufrir. El agonizante dolor se había ido apagando, y ya no salía sangre de mi boca. Así que, rápida como yo sola, llevé mis labios a su cuello, entreabrí la boca, y la volí a cerrar. Con la única diferencia en la que ahora, había un trozo su carne entre mis dientes. Apreté, tiré y forcejeé, y todo eso, con un dolor terrible de boca. Supongo que por esa sencilla razón, no pude lucirme completamente, y tuve que soltar rápidamente mi víctima. ¡Cabrón!
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Mientras esperaba que se calmara pude notar como ambos estábamos bastante maltrecho, ella sangrando por mi puñetazo, yo con diversos arañazos por la cara y cuello, cristales clavados en los brazos y el labio partido. Mierda, si ella estaba en mejores condiciones que yo. Bueno, al menos todo había acabado y podría perder a ese engendro humano de vista para siempre. Parecía que se calmaba de verdad, demasiado bonito para ser verdad. Oh, oh, esa mirada otra vez... algo trama.
- ¡Ah! ¡¡¡¡Sueltame hija de la gran puta!!!!- Grité cuando noté el tremendo bocado que me dió en la yugular.
Un puto animal, esa cosa tenía más de bestia que de persona. Fué tan intenso el dolor que solté sus manos, dejándola libre de nuevo. En la cabeza solo tenía la lacerante sensación en la garganta pero por suerte duró poco, como suelen decir, lo bueno si breve dos veces bueno. Notaba un fuerte escozor en la zona del bocado, seguro que la muy zorra me había arrancado un trozo de cuello. A situaciones desesperadas, medidas desesperadas. Poniendo toda la carne en el asador cambié de postura poniendo una rodilla en su barriga y presionando con fuerza, que se le salieran los intestinos por la boca joder. Ese gesto pareció acabar con sus últimas fuerzas aunque la condenanda lo seguía intentando.
Dejé de presionar la barriga y la hice girar sobre si misma, poníendola bocabajo, ¿cómo lo hice? Pues con ayuda de mis 20 cm de más y de mis kilos de músculo que ella no tenía. A esas alturas de la pelea poco podía hacer. Puse mis rodillas contra su espalda y agarré uno de sus brazos retorciéndolo hacia atras, tantas películas de policías deteniendo a gente me había servido para algo. Estirando la mano alcancé la mochila todavía abierta, en su interior se encontraba lo que buscaba una cuerda y cinta aislante. No hay que ser ningún lumbreras para adivinar lo que iba a hacer a continuación. Le ate sus manitas a la espalda y como ganador del combate me permití el lujo de sentarme en su mullida espalda mientras ella aún yacia bocabajo.
- Bueeeno, eres más comoda de lo que aparentas.- dije mientras empezaba a hacer inventario de las múltiples heridas que ahora poblaban mi cuerpo, empezando por quitarme los cristales que se me habían clavado en los brazos.
- ¡Ah! ¡¡¡¡Sueltame hija de la gran puta!!!!- Grité cuando noté el tremendo bocado que me dió en la yugular.
Un puto animal, esa cosa tenía más de bestia que de persona. Fué tan intenso el dolor que solté sus manos, dejándola libre de nuevo. En la cabeza solo tenía la lacerante sensación en la garganta pero por suerte duró poco, como suelen decir, lo bueno si breve dos veces bueno. Notaba un fuerte escozor en la zona del bocado, seguro que la muy zorra me había arrancado un trozo de cuello. A situaciones desesperadas, medidas desesperadas. Poniendo toda la carne en el asador cambié de postura poniendo una rodilla en su barriga y presionando con fuerza, que se le salieran los intestinos por la boca joder. Ese gesto pareció acabar con sus últimas fuerzas aunque la condenanda lo seguía intentando.
Dejé de presionar la barriga y la hice girar sobre si misma, poníendola bocabajo, ¿cómo lo hice? Pues con ayuda de mis 20 cm de más y de mis kilos de músculo que ella no tenía. A esas alturas de la pelea poco podía hacer. Puse mis rodillas contra su espalda y agarré uno de sus brazos retorciéndolo hacia atras, tantas películas de policías deteniendo a gente me había servido para algo. Estirando la mano alcancé la mochila todavía abierta, en su interior se encontraba lo que buscaba una cuerda y cinta aislante. No hay que ser ningún lumbreras para adivinar lo que iba a hacer a continuación. Le ate sus manitas a la espalda y como ganador del combate me permití el lujo de sentarme en su mullida espalda mientras ella aún yacia bocabajo.
- Bueeeno, eres más comoda de lo que aparentas.- dije mientras empezaba a hacer inventario de las múltiples heridas que ahora poblaban mi cuerpo, empezando por quitarme los cristales que se me habían clavado en los brazos.
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Tras aquella pelea entre esos dos pequeños "titanes", todo parecía haberse calmado. Apenas había una leve brisa en la ribera e incluso el cielo parcía presentar un color gris más claro. En medio de toda esa repentina y extraña paz en ese mundo, algo fuera de lo común sucedió. Una figura apareció flotado por el río, pasando por debajo de los puentes y viajando por el centro de aquella lenta corriente de agua. En el punto de llegar al lugar donde aquellos dos muchachos se encontraban, el cuerpo blanquecino comenzó a desviarse hasta alcanzar la orilla en la que había tenido lugar la pelea. El fheral muerto quedó suspendido antinaturalmente sobre el agua, sin moverse.
De pronto, para sorpresa de todos, abrió de golpe los ojos. La oscuridad los dominaba. Con esas dos esferas completamente negras se dirigió a esos dos humanos y alzó su mano derecha, enseñando la palma. En unas letras irregulares, en unas marcas que aún no habían acabado de cicatrizar, se desdibujaban dos palabras: "FOLLOW ME". Tras varios segundos esperando para que lo leyesen, dejó caer el brazo a su lado y comenzó a andar a lo largo de la orilla. ¿Le seguirían esos dos jóvenes incautos?
De pronto, para sorpresa de todos, abrió de golpe los ojos. La oscuridad los dominaba. Con esas dos esferas completamente negras se dirigió a esos dos humanos y alzó su mano derecha, enseñando la palma. En unas letras irregulares, en unas marcas que aún no habían acabado de cicatrizar, se desdibujaban dos palabras: "FOLLOW ME". Tras varios segundos esperando para que lo leyesen, dejó caer el brazo a su lado y comenzó a andar a lo largo de la orilla. ¿Le seguirían esos dos jóvenes incautos?
Master- Mensajes : 53
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
- Oye no tendrás un cigarrillo que prestarme, ¿verdad?- dije aún sentado sobre la espalda de Gabrielle, como si la última media hora no hubiese existido.
Fue en ese momento cuando algo cambió en el ambiente, algo que de inmediato me puso los pelos de punta, llámalo sexto sentido, presentimiento, intuición, pero de repente la constante brisa que había estado soplando se había detenido y la oscuridad había menguado tenuemente. Casi esperaba ver aparecer a Bambi por la ribera del rio. Pero no, no apareció Bambi precisamente, sino algo que me hizo cagarme de miedo en los pantalones no, lo siguiente.
Podía aceptar la presencia de una ciudad fantasma sin rastro de sus creadores,podía aceptar a zombis caníbales llamados fherals y podía aceptar que la rubia que me servía de asiento casi me pega una paliza... pero desde luego lo que no podía aceptar era la escena que se me presentó a continuación. Una figura blanquecina flotando por encima del río, venía siguiendo el curso de la corriente. No, espera, eso no puede ser, un fheral levitando y con los ojos cerrados venía directamente hasta nosotros.
- Joder, joder.... ¿Estas viendo lo mismo que yo?- le dije a la rubia mientras me ponía en pie agarrando la cuerda que ataba las manos de Gabrielle, obligándola a ella a levantarse tambien.
Retrocedí un par de pasos y entonces el fheral que se había detenido a la orilla del agua abrió los ojos, tragué saliva al ver los dos pozos de oscuridad que tenía por globos oculares. Ni iris, ni pupila ni córnea, tan solo oscuridad. La tensión que había en el habiente se podía cortar con un cuchillo, y yo allí, sin tener valor siquiera para echar a correr. O sea, doblemente cobarde. Levantó la mano y yo entrecerré los ojos vislumbrando mi final... pero no, en su palma, con gruesos trazos irregulares se podían leer claramente una orden.
- Seguidme- murmuré para mí mismo.- Joder, que ahora se va. El burro delante para que no se espante, tira delante Gabrielle, vamos a ver que quiere la cosa esa.- dije intentando teñir mi voz de una decisión que no sentía en absoluto. Si no echaba a correr era porque tenía la certeza de que el bicho ese se giraría y nos mataría, asi que agarré el brazo de la chica y la obligué a caminar a unos 5 o 10 metros de la cosa esa. Joder, caminar... me dolía todo el cuerpo...
Fue en ese momento cuando algo cambió en el ambiente, algo que de inmediato me puso los pelos de punta, llámalo sexto sentido, presentimiento, intuición, pero de repente la constante brisa que había estado soplando se había detenido y la oscuridad había menguado tenuemente. Casi esperaba ver aparecer a Bambi por la ribera del rio. Pero no, no apareció Bambi precisamente, sino algo que me hizo cagarme de miedo en los pantalones no, lo siguiente.
Podía aceptar la presencia de una ciudad fantasma sin rastro de sus creadores,podía aceptar a zombis caníbales llamados fherals y podía aceptar que la rubia que me servía de asiento casi me pega una paliza... pero desde luego lo que no podía aceptar era la escena que se me presentó a continuación. Una figura blanquecina flotando por encima del río, venía siguiendo el curso de la corriente. No, espera, eso no puede ser, un fheral levitando y con los ojos cerrados venía directamente hasta nosotros.
- Joder, joder.... ¿Estas viendo lo mismo que yo?- le dije a la rubia mientras me ponía en pie agarrando la cuerda que ataba las manos de Gabrielle, obligándola a ella a levantarse tambien.
Retrocedí un par de pasos y entonces el fheral que se había detenido a la orilla del agua abrió los ojos, tragué saliva al ver los dos pozos de oscuridad que tenía por globos oculares. Ni iris, ni pupila ni córnea, tan solo oscuridad. La tensión que había en el habiente se podía cortar con un cuchillo, y yo allí, sin tener valor siquiera para echar a correr. O sea, doblemente cobarde. Levantó la mano y yo entrecerré los ojos vislumbrando mi final... pero no, en su palma, con gruesos trazos irregulares se podían leer claramente una orden.
- Seguidme- murmuré para mí mismo.- Joder, que ahora se va. El burro delante para que no se espante, tira delante Gabrielle, vamos a ver que quiere la cosa esa.- dije intentando teñir mi voz de una decisión que no sentía en absoluto. Si no echaba a correr era porque tenía la certeza de que el bicho ese se giraría y nos mataría, asi que agarré el brazo de la chica y la obligué a caminar a unos 5 o 10 metros de la cosa esa. Joder, caminar... me dolía todo el cuerpo...
Alexander Sttida- Mensajes : 91
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
Aggh. ¿Ahora la boca me vuelve a sangrar? Ah no, seguramente sea la sangre de aquel tío, no se puede decir que le halla mordido especialmente flojito. Já, gilipollas. Ya, después de sus gritos y de haberlo soltado, no podía esperar más que una buena tunda, y sin embargo, no se me ocurrió cerrar los ojos, no se me ocurrió suplicar, lo único que hice fue levantar un poco más la barbilla, aún desafiante en esas condiciones. ¡Qué no, qué no estoy loca! Bueno, puede que sea un poco masoca y sangrienta, pero os puedo asegurar que aún conservo algo de mi preciada cordura.
¡Esperad! ¿Qué está haciendo? ¿Por qué se mueve? Ya veréis, ahora llega el momento del dolor. Me mordí el labio inferior. Sí, bueno, hasta que me dí cuenta del agonizante dolor que sentía al morder, el mismo que acababa de sentir. Yo creo que mi memoria está afectada por los innumerables kilos de maría que me he metido. ¡Joder, espera, qué sí que hace pupa! Yo no sé que está haciendo, pero me van a salir los intestinos, los pulmones, el hígado y... Bueno, sí, todo lo que esté ahí dentro. Boqueé y pataleé, todo al mismo tiempo, y, sin embargo, pasados unos insttantes, me rendí. Estoy dmeasiado molida para seguir luchando. Bueno, bueno, no me he rendido del todo, aún sigo tramando un plan perverso para volarle la cabeza al tío este.
¡Dios! ¿Y ahora qué coño hace? Porque cada movimiento me duele un montón. Genial, genial, ahora resulta que estoy de espaldas. Cada vez dudo más de como he conseguido tirar al culturista este al suelo. Tal vez ha sido un momento de rabia. Sí, seguramente.
-Aaaah, ah, ah, aaaaah.-gemí. ¡Dios, mi brazo, mi brazo! ¿Sabéis cuanto duele eso que me está haciendo? Pues mucho. Me revolví otra vez.. Vale, no, así duele más. Además, me está clavando otra cosa en la espalda. Yo que sé que es, ya he perdido todo sentido.- ¡Aaaaah!- me quejé de nuevo, más estruendosamente. Dios, Dios, me duele todo. ¿Porqué no muero ya y acabamos?
Jodeeeer... ¿Qué está haciendo? Oh, hijo de puta. Me está atando. Oh, mon dieu. ¡Se ha sentado encima! ¿Pero este tío está loco o qué? Aaaaargh, me duele todo todísimo. Pobre de mí, en serio. El tío pesaba la suyo, o bueno, a lo mejor es que yo peso muy poquito, pero el caso es que me está chafando, y seguramente dejándome a lo loncha de Jamón York.
Os juro que yo le ovy a dar cómoda. Le voy a meter el cómoda por donde yo me sé. No, no, coño, que no me quedan fuerzas. ¿Es que voy a seguir rebelándome hasta la extenuación? Yo creo que sí.
¿Un cigarrillo? Aih, ojalá tuviese uno. Es más, NECESITO un cigarrillo urgentemente. Necesito nicotina, la puta nicotina. ¡Joder! Si es que sé que no lo voy a conseguir, y viene el gilipollas este a recordármelo. Por cierto, ¿sabéis? Hace rato que he dejado de sentir diversas partes de mi cuerpo. Yo creo que cuando me levante no van a reaccionar, si me levanto algún dia, claro está. Arrggh.
Es un milagro, ahora se está quieto. Y por fin se ha callado. Yo creo que le ha pasado algo. A ver si hay suerte y le ha dado un ataque cardíaco de esos... ¡No, no y no! Qué si no, no me desata. Me removí un poco. Joder, a lo mejor s eha quedado en estado de shock. Dios, ¿qué estará pasando? Vale, como mi visión se reduce básicamente a.... el puto suelo que se encuentra delante de mis narices, no puedo ver nada. Joder, joder, joder.
-¡Pues no, joder, no veo nada!- gemí, tras su extraña pregunta. A saber lo que le pasaba. Oh, no lo quiero saber, no lo quiero saber, no... Dios, me ha levantado. Justo cuando menos lo necesitaba. Y he encontrado ante mí a ese... A esa cosa. Pegué tal bote que me hice otro destrozo en mi pie herido. Aaaaaaah, ¿qué coño es eso? Dios mío, Dios, mío, llévame pronto (?.
No tardé demasiado en retroceder atnto como para pegarme a la espalda de Alexander, creo. Ya, que me tenía agrrada por las cuerds, y es una posición la ostia de incómoda, pero yo no me quedo delante del monstruo ese ni por kilos y kilos de droga. Bueno, sí, tal vez por eso sí. Se me revolvió el estómago, y ni se me ocurrió salir a mirar. Hoy me va a dar algo, joder.
¡Ah, bueno, por lo menos mis músculos sí que han reaccionado! Pero a qué precio, joder, es que... Dios mío.
Así que, tras la primera impresión, no he vuelto a mirar al bicho, y me he resguardado tras el tío este. ¿Y ahora qué dice? ¿Seguidme? ¿No... no.... no querrá que sigamos al bicho ese no?
Peor antes de que pudiese seguir pensando, tiró de mí con una fuerza inhumana (?. Cabronazo. Intenté resistirme, plantar los pies en el suelo, tirar de la cuerda hacia atrás, pero eso lo servía para causarme más dolor, porque aquél tío era demasiado para mí.
-No, no... ¿Qué haces? Por favor...- Oh, là là. ¿Qué he echo? ¿Le he dicho por favor? ¿Cómo puede ser? Esto no es posible, joder.
¡Esperad! ¿Qué está haciendo? ¿Por qué se mueve? Ya veréis, ahora llega el momento del dolor. Me mordí el labio inferior. Sí, bueno, hasta que me dí cuenta del agonizante dolor que sentía al morder, el mismo que acababa de sentir. Yo creo que mi memoria está afectada por los innumerables kilos de maría que me he metido. ¡Joder, espera, qué sí que hace pupa! Yo no sé que está haciendo, pero me van a salir los intestinos, los pulmones, el hígado y... Bueno, sí, todo lo que esté ahí dentro. Boqueé y pataleé, todo al mismo tiempo, y, sin embargo, pasados unos insttantes, me rendí. Estoy dmeasiado molida para seguir luchando. Bueno, bueno, no me he rendido del todo, aún sigo tramando un plan perverso para volarle la cabeza al tío este.
¡Dios! ¿Y ahora qué coño hace? Porque cada movimiento me duele un montón. Genial, genial, ahora resulta que estoy de espaldas. Cada vez dudo más de como he conseguido tirar al culturista este al suelo. Tal vez ha sido un momento de rabia. Sí, seguramente.
-Aaaah, ah, ah, aaaaah.-gemí. ¡Dios, mi brazo, mi brazo! ¿Sabéis cuanto duele eso que me está haciendo? Pues mucho. Me revolví otra vez.. Vale, no, así duele más. Además, me está clavando otra cosa en la espalda. Yo que sé que es, ya he perdido todo sentido.- ¡Aaaaah!- me quejé de nuevo, más estruendosamente. Dios, Dios, me duele todo. ¿Porqué no muero ya y acabamos?
Jodeeeer... ¿Qué está haciendo? Oh, hijo de puta. Me está atando. Oh, mon dieu. ¡Se ha sentado encima! ¿Pero este tío está loco o qué? Aaaaargh, me duele todo todísimo. Pobre de mí, en serio. El tío pesaba la suyo, o bueno, a lo mejor es que yo peso muy poquito, pero el caso es que me está chafando, y seguramente dejándome a lo loncha de Jamón York.
Os juro que yo le ovy a dar cómoda. Le voy a meter el cómoda por donde yo me sé. No, no, coño, que no me quedan fuerzas. ¿Es que voy a seguir rebelándome hasta la extenuación? Yo creo que sí.
¿Un cigarrillo? Aih, ojalá tuviese uno. Es más, NECESITO un cigarrillo urgentemente. Necesito nicotina, la puta nicotina. ¡Joder! Si es que sé que no lo voy a conseguir, y viene el gilipollas este a recordármelo. Por cierto, ¿sabéis? Hace rato que he dejado de sentir diversas partes de mi cuerpo. Yo creo que cuando me levante no van a reaccionar, si me levanto algún dia, claro está. Arrggh.
Es un milagro, ahora se está quieto. Y por fin se ha callado. Yo creo que le ha pasado algo. A ver si hay suerte y le ha dado un ataque cardíaco de esos... ¡No, no y no! Qué si no, no me desata. Me removí un poco. Joder, a lo mejor s eha quedado en estado de shock. Dios, ¿qué estará pasando? Vale, como mi visión se reduce básicamente a.... el puto suelo que se encuentra delante de mis narices, no puedo ver nada. Joder, joder, joder.
-¡Pues no, joder, no veo nada!- gemí, tras su extraña pregunta. A saber lo que le pasaba. Oh, no lo quiero saber, no lo quiero saber, no... Dios, me ha levantado. Justo cuando menos lo necesitaba. Y he encontrado ante mí a ese... A esa cosa. Pegué tal bote que me hice otro destrozo en mi pie herido. Aaaaaaah, ¿qué coño es eso? Dios mío, Dios, mío, llévame pronto (?.
No tardé demasiado en retroceder atnto como para pegarme a la espalda de Alexander, creo. Ya, que me tenía agrrada por las cuerds, y es una posición la ostia de incómoda, pero yo no me quedo delante del monstruo ese ni por kilos y kilos de droga. Bueno, sí, tal vez por eso sí. Se me revolvió el estómago, y ni se me ocurrió salir a mirar. Hoy me va a dar algo, joder.
¡Ah, bueno, por lo menos mis músculos sí que han reaccionado! Pero a qué precio, joder, es que... Dios mío.
Así que, tras la primera impresión, no he vuelto a mirar al bicho, y me he resguardado tras el tío este. ¿Y ahora qué dice? ¿Seguidme? ¿No... no.... no querrá que sigamos al bicho ese no?
Peor antes de que pudiese seguir pensando, tiró de mí con una fuerza inhumana (?. Cabronazo. Intenté resistirme, plantar los pies en el suelo, tirar de la cuerda hacia atrás, pero eso lo servía para causarme más dolor, porque aquél tío era demasiado para mí.
-No, no... ¿Qué haces? Por favor...- Oh, là là. ¿Qué he echo? ¿Le he dicho por favor? ¿Cómo puede ser? Esto no es posible, joder.
Gabrielle A. Voltaire- Mensajes : 123
Localización : Wonderland :D
Re: Un reducto de agua... ¡Imposible! [Alex Stti x)]
El fheral se va alejando a un ritmo no muy rápido de donde os encontrábais, siempre siguiendo el curso del río, en sentido contrario a las aguas. ¿Dónde os llevará esa bestia? Quizás no deberíais haber pensado en seguirla...
Alatz Seb. de Herrera- Mensajes : 1313
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Vie Feb 10, 2012 8:03 pm por Christian Baskerville
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